El Real Zaragoza lleva tiempo sin comportarse sin él mismo. No tiene la presencia en el campo que tenía antes ni tampoco cuenta ya con el respeto que le tenían los rivales. Este Real Zaragoza cada está más lejos de recuperar lo que antes era. Y lo que es más triste está consiguiendo que zaragocistas de pro pongamos en duda a nuestro Real Zaragoza.
El entorno, el compromiso de los jugadores, las deudas y su dirigente están acabando con las ilusiones de muchos aficionados, que cada vez ven más lejos recuperar lo que antes fuimos. Triste pero cierto. Pocos son los niños que no se fijan en el Barcelona o el Madrid. Aunque yo digo con orgullo "Soy del Real Zaragoza".
Las cosas están complicadas, cada vez más negras. Ahora se ha visto a cuánto asciende parte de la deuda del club. Una deuda que cada vez es mayor. Y eso hace que las ilusiones se difumen y se marchen.
Señor Agapito - por nombrarle de alguna forma - está consiguiendo destruir al Real Zaragoza y a su afición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario